El Bar Miramar es ese típico lugar en Isla Cristina que no puedes dejar de visitar si eres amante de la buena comida y la buena compañía. Desde 1961, este bar es conocido por sus tapitas y su cervecita fresquita, perfectas para disfrutar en su ambiente acogedor. Ubicado en la Calle Prof. Ramón Noya, 6, aquí encontrarás platos tradicionales elaborados con pescados y mariscos frescos, ¡directamente del mar a tu mesa! Con más de 526 opiniones que resaltan su calidad, no es de extrañar que esté entre los número 58 de los pubs y bares de la zona.
Si estás buscando un rincón auténtico donde desconectar y pasar un buen rato con amigos o familia, Bar Miramar es tu sitio. Puedes llamar al 645025029 para hacer una reserva y asegurarte una mesa, ya que este lugar suele llenarse. Además, su terraza es ideal para esos días soleados. ¡No te lo pierdas y date un capricho con sus deliciosas tapas!
Mapa Ubicación BAR MIRAMAR
Dónde se encuentra el Bar Miramar
¡Hey, amigos! ¿Estáis buscando un buen sitio para disfrutar de unas cervezas bien frías y unas tapas espectaculares en Isla Cristina? ¡Dejadme deciros que el Bar Miramar es una parada obligatoria! Situado en Calle Prof. Ramón Noya, 6, en plena Punta del Caimán, este bar de toda la vida, que antes era el Fortuna, tiene todo lo que necesitáis para pasar un buen rato.
El ambiente es superacogedor y, aunque algunas veces puede estar un poco lleno en verano, el servicio es relativamente rápido y amable. No olvidéis pedir sus famosas puntillitas y el atún en sus distintas modalidades. Hasta los tomates aliñados son una delicia. La calidad de la comida es realmente buena, así que prepararos para disfrutar de un festín. Además, el precio por persona suele rondar entre 10 y 20 euros, lo que lo hace aún más atractivo.
Otra cosa que me encanta del Miramar es que no es solo un buen bar, es un lugar mítico en Isla Cristina. Todos los días podéis disfrutar de un pescado fresco y bien elaborado. Ya sea en medias o raciones enteras, siempre hay algo para satisfacer vuestro antojo. Y, por cierto, si os gustan las croquetas, ¡tenéis que probarlas! Son una auténtica locura de sabor.
Y para quienes se preguntan, ¿dónde se encuentra el Bar Miramar? Éste está en Calle Prof. Ramón Noya, 6, así que no hay excusas para no hacer una parada aquí. Prometo que no os arrepentiréis y que saldréis con una sonrisa en la cara (¡y un par de tapas en la barriga!).
Desde cuándo está abierto el Bar Miramar
¡Ya te digo que el Bar Miramar es el lugar al que tienes que ir si andas por Isla Cristina! Llevamos dos años repitiendo y la experiencia siempre es de cinco estrellas. Las tapas de atún y esas croquetas de carabineros son algo de otro mundo, realmente de diez. Si te animas a probar, estoy seguro de que te van a encantar. Además, el servicio es rapidísimo y la comida siempre está riquísima. Y si te preocupa el precio, no te preocupes, porque es bastante ajustado, entre 20 y 30 € por persona, y sales con la barriga más que contenta.
Y no puedo dejar de mencionar sus famosas puntillitas. Si hay algo que hay que probar sí o sí, son esas mismas. El pan que te sirven también es un puntazo, ¡buenísimo! Así que después de la cena, un helado por la zona y un paseo son el plan perfecto. La ubicación es genial, con una buena terraza que te permite disfrutar del ambiente. A veces puede estar muy concurrido, pero yo creo que eso es un buen síntoma, ¡significa que tienen algo bueno que ofrecer!
La calidad y el trato que recibes son de lo mejor. A veces hemos ido en grupos grandes y nunca nos han hecho sentir apurados, ¡todo lo contrario! Te cuidan como si fueras de la familia y se nota que les gusta lo que hacen. Yo lo recomiendo con los ojos cerrados, y si estás buscando un bar donde todo esté buenísimo, el Miramar no te decepcionará.
El Bar Miramar lleva abierto desde hace un par de años, así que si todavía no lo conoces, ¡no sé a qué estás esperando! Te va a dejar una buena impresión y seguro que querrás repetir.
Qué tipo de comida se ofrece en el Bar Miramar
Te cuento que la experiencia en el Bar Miramar fue un tanto peculiar. Por un lado, la comida no estaba mal, pero la verdad, daba un poco de miedo pedir algo. La camarera que nos atendió parecía estar en modo "borde", como si cada orden que le hicieras fuera una ofensa personal. Estaban saturados, lo entiendo, pero que me digan que no soy el único en el bar cuando le pido una Cocacola... ¡Vamos! Un simple “disculpe, ahora le atiendo” habría hecho maravillas. El servicio realmente dejó que desear y eso es una pena, porque el sitio tiene potencial. La próxima vez te recomendaría que lleves un poco más de paciencia y no dudes en levantarte a pedir cuando veas que se complica.
Sin embargo, no todo fue malo. En varias ocasiones, escuché que la comida era casera y a buen precio, algo que siempre aprecio. Hay un ambiente de bar de toda la vida que, aunque se siente un poco más nuevo por las renovaciones, se mantiene como un lugar donde se puede comer bien sin romper la hucha. Las raciones pueden no ser las más elegantes, pero ¡qué rico estaba todo! Es cierto que cocina marinera por lo que sé, hace que sea un atractivo especial. Algunos amigos dicen que se nota cómo han cambiado las cosas con el tiempo, pero para picar algo rápido, no está nada mal.
Lo mejor de todo fue que, en una visita anterior, conocí a un camarero que parecía un verdadero crack. Desde el primer momento, todo el personal se movía como un engranaje bien aceitado y la atención era excepcional. Repetí sin pensarlo, especialmente porque el zumo de naranja natural era de una calidad que no esperaba, y esa variedad de panes para las tostadas nunca está de más. Ideal si buscas un buen desayuno o comer algo rico mientras te relajas en la terraza (porque dentro, con el calor y el olor, es casi imposible).
Entonces, ¿qué tipo de comida se ofrece en el Bar Miramar? En resumen, puedes esperar cocina marinera bien hecha, opciones de comida casera y sabrosa a buen precio, perfectas para disfrutar dentro de ese ambiente auténtico de bar. Pero como siempre, revisa con quién vas, ya que la actitud del servicio puede variar. ¡Una experiencia mixta, pero creo que le daré otra oportunidad!
Qué variedad de platos destacan en el menú del Bar Miramar
Y bueno, el Bar Miramar tiene un ambiente que invita a relajarse, aunque no todo fue perfecto en mi última visita. La terraza es bien grande, pero había una camarera, una señora rubia que no paraba. Parecía un robot haciendo mil cosas a la vez: limpiando mesas, sirviendo bebidas, comandando… ¡Un 10 para ella! Pero, claro, el trato, a veces, se queda un poco corto. En días de fiestas, yo diría que deberían tener más manos en la cocina. ¡Eso sería lo ideal!
En cuanto a la comida, las medias raciones son bastante normalitas, aunque las croquetas de carabineros son un must. ¡Son espectaculares! En cambio, las pavías de merluza ni se asoman, sólo hay rebozado y la merluza se pierde ahí. Ah, y cuidado con el pan; no es normal que te cobren 1,50€ por un minibollito un tanto duro y una bolsa de picos. Ya te digo, no es el detalle que esperas.
Es verdad que he escuchado cosas mixtas, desde quienes aman las tapas hasta quienes han salido con el estómago revuelto. Las albóndigas parece que no logran impresionar a nadie y esa cazuela de fideos… uff, no la quieren ni en la escuela. Además, el olor a fritura al entrar puede ser un poco abrumador, y la limpieza del baño deja mucho que desear. Pero hay quienes dicen que tienen guisos magníficos y que no suelen hacer esperar.
Y ya que estamos, la pregunta del millón: ¿Qué platos destacan en el menú del Bar Miramar? Pues, la carta es pequeña, pero el pescado siempre da la talla. Todo el mundo habla maravillas del morrillo de atún, la raya en pimentón y las tortillitas de camarones. El atún en adobo también tiene su renombre. Eso sí, si vas con ganas de cenar, ¡mejor reserva! Hay que asegurarse de que la experiencia sea aún mejor, porque el bar tiene su encanto, ¡y si te pillas bien, vale la pena!
Cuál es la especialidad del Bar Miramar en cuanto a bebidas
Y mira que siempre había oído hablar del Bar Miramar, ¡es todo un clásico! Pero cuando finalmente nos decidimos a ir, la experiencia fue un poco agridulce. La verdad es que estaba a reventar, como es habitual, pero el aceite del día no estaba a la altura. ¡Qué decepción! A pesar de que el género suele ser bueno, esa vez todo sabía a más de lo que debería. Nos quedamos un poco defraudados, especialmente teniendo en cuenta que siempre tiene buenas críticas y un ambiente lleno de gente. Las raciones también eran un poco escasas, y el trato, aunque correcto, no fue lo que esperábamos.
Aún así, el bar tiene su encanto. Ofrecen algunos platos típicos de la zona que a veces te hacen pensar que vale la pena visitarlo. La relación calidad/precio es más bien regular, lo que se puede atribuir a la escasez de los platos. Ya lo dice el dicho, 'hay que saborear'. El adobo que pedimos tenía un gustillo fuerte a vinagre, así que no creo que lo repita. Pero en general, hay quienes defienden que se come bien y a buen precio, así que puede que simplemente tuvimos un día malo.
De lo que sí hay que hablar es del servicio. Hay camareras muy simpáticas que, si tienes suerte, te invitan a un chupito al finalizar la comida. En nuestro caso, estábamos tan sorprendidos que nos marchamos contentísimos, a pesar de la comida. Las tapas a 2 € y las medias raciones por 5,5 € son un buen precio si logras encontrar algo que te llame. Eso sí, cuidado con el tinto de verano que te preparan; ¡te lo cobran a 5 €, más caro que un cubata!
Ahora, si estás pensando en las bebidas, no esperes encontrar botellines de Cruzcampo, ya que eso no estaba en su menú. Lo más habitual es que sirvan refrescos Kas en latas, pero bueno, es un detalle que puedes dejar pasar si lo que buscas son buenos platos para disfrutar. En cuanto a bebidas, la especialidad del Bar Miramar no parece brillar tanto como sus platos, pero siempre puedes probar el ambiente y las opciones de tapas. ¡Salud!
Cuántas opiniones tiene el Bar Miramar y qué destacan de ellas
Y hablando del Bar Miramar, ¿qué te puedo decir? Es ese tipo de lugar al que llegas con un buen rollo y sales con una sonrisa, además de la barriga llena. Tiene unas 4 estrellas que, aunque tal vez no parecen mucho, créeme, están más que merecidas. Los precios son imbatibles, como esos tapones a 2,50 € que son una auténtica ganga. Si estás por Isla Cristina, es prácticamente un crimen no pasar por allí.
Las tapas son todo un espectáculo, especialmente esas lagrimitas de pollo que son de lo mejor que te puedes meter entre pecho y espalda. Y ni hablar del montadito de aiha o del atún en adobo; son como un abrazo a la gastronomía andaluza. El choco frito entero, que parece sencillo, se convierte en una maravilla en sus manos. La verdad, los platos están tan frescos y bien preparados que repites sin pensarlo. Y el servicio, ¡uff! El camarero, siempre atento y con una sonrisa, hace que te sientas como en casa.
Además, el Bar Miramar es un sitio simpaticón con una gran variedad de tapas riquísimas y raciones generosas. La relación calidad-precio es bastante buena, aunque, ya te digo, debería mejorar un poco la terraza; el ambiente exterior podría estar más cuidado y el olor a fritura puede ser intenso. Pero hey, si te gusta picar y probar típicos, aquí puedes disfrutar de delicias como adobos, raya en pimentón o garbanzos con langostinos. En general, hay un buen puñado de opiniones, y se vuelve evidente que los clientes destacan la calidad de la comida, el buen trato del personal, y esos precios que siempre son un aliciente para volver.
En resumen, el Bar Miramar tiene un buen número de opiniones, y lo que la mayoría resalta son las tapitas deliciosas, la variedad de platos y el excelente servicio. Un lugar que seguramente querrás incluir en tu ruta si andas por la zona.
Cuál es la clasificación del Bar Miramar entre los pubs y bares de la zona
Te lo digo de verdad, si estás en Isla Cristina y no has pasado por el Bar Miramar, estás dejando pasar una joyita. Este lugar tiene un aire tan acogedor que te hace sentir como en casa desde el primer momento. Ubicado en la Calle Prof. Ramon Noya, 6, es el sitio perfecto para relajarte después de un día de playa o simplemente para disfrutar de un buen rato con amigos. Y con esas décadas de experiencia en el negocio, los dueños saben cómo brindar un servicio que te deja con ganas de volver.
La carta es otro tema. Aunque no es un menú extenso, cada opción está pensada para que disfrutes de lo mejor de la gastronomía local. Las tapas son una delicia, y si te gustan los mariscos, no te puedes perder las gambas a la plancha. ¡Son de las mejores de la zona, seguro! Y si lo tuyo son los cócteles, tienen una pequeña selección que no decepciona, especialmente si te van los sabores tropicales. Puedes optar por un buen mojito para refrescarte, que en esos días de calor, va como anillo al dedo.
Y lo mejor de todo, la atmósfera es súper relajada. Siempre hay música de fondo que anima el lugar, y no rara vez, puedes encontrarte con algunos eventos en vivo. Si te gusta conocer gente nueva, este es el sitio ideal. La gente es muy abierta, y terminarás haciendo amigos en un abrir y cerrar de ojos. Así que no te sorprendas si acabas quedándote más tiempo del que pensabas.
Sobre la clasificación, te cuento que el Bar Miramar es uno de los bares más valorados de la zona, con buenas reseñas que destacan tanto la calidad de sus comidas como la amabilidad de su personal. ¡No hay duda! Si buscas un plan auténtico y con buen ambiente, este bar tiene su sitio en tu lista de paradas obligatorias.
Fotografías BAR MIRAMAR
