Bar restaurante Sal y tomate

Si buscas un rincón inolvidable en Sevilla, Bar Restaurante Sal y Tomate es el lugar ideal. Situado en la calle Asunción, 65, este sitio combina lo mejor de la cocina moderna con platos tradicionales, dándole un giro único que te sorprenderá. Desde el primer bocado, notarás que la calidad de sus ingredientes marca la diferencia, y el servicio es igualmente excepcional, con un personal siempre educado y amable que te hace sentir como en casa.

Además, Sal y Tomate no solo se convierte en un destino gastronómico, sino que también te ofrece un ambiente relajado, perfecto para disfrutar de una buena charla. Con un menú que incluye 20 opciones de platos y bebidas, hay algo para todos los gustos. Y si te preguntas si es un buen lugar para desayunar, ¡definitivamente merece la pena! Así que ya sabes, si estás en el corazón de Sevilla, date una vuelta y ¡prueba la experiencia de Sal y Tomate!

Dónde se encuentra el Bar Restaurante Sal y Tomate

¡Hey, colegas! Si están buscando un lugar chulo para disfrutar de unas buenas tapas o una comida rica, tienen que conocer el Bar Restaurante Sal y Tomate. Este sitio está en la C/ Asunción, 65, 41011 Sevilla, así que, si andan por la zona, ¡no se lo pueden perder! La decoración es muy agradable, te hace sentir como en casa mientras saboreas sus platos. Además, hay un ambiente acogedor que lo hace perfecto para compartir con amigos.

La atención aquí es de 10. El personal es super amable y siempre está al tanto de tus necesidades. La cocina cumple perfectamente su cometido, y todo lo que pedimos estaba realmente bueno. En general, podrías gastar de 10 a 20 € por persona, lo que está genial para la calidad que ofrecen. Si van, no dejen de probar la ensaladilla con bonito y chicharrones de Cádiz. ¡Es un must!

Si buscan algo un poco más especial, la experiencia que tuve celebrando un cumpleaños fue la bomba. Probé el pulpo, el bikini y el bacalao, y me quedé sorprendido por lo bien que sabían. Eso sí, se siente un pelín más caro (20-30 € por persona), pero vale cada céntimo. El servicio fue impecable y el ambiente estaba muy logrado, con un toque de celebración. Volvería a este sitio sin dudarlo.

No todo es perfecto, claro. El salón tiene un aspecto un poco frío y la carta no es demasiado extensa, pero lo que hay está muy bien presentado y sabe espectacular. Si buscan un plan diferente, su terraza exterior es una buena opción para relajarse con una bebida. Eso sí, tengan en cuenta que aparcar en la zona es un poco complicado, aunque hay opciones cerca, como el campo de la feria.

Entonces, resumiendo: si se preguntan dónde se encuentra el Bar Restaurante Sal y Tomate, no hay lugar a dudas que tendrán que visitar la C/ Asunción, 65, 41011 Sevilla. ¡Les aseguro que se lo pasarán genial y querrán volver por más!

Qué tipo de cocina ofrece Sal y Tomate

Y hablando de Sal y Tomate, no puedo dejar de mencionar lo bien que se come allí. Si quieres disfrutar de un buen servicio, aquí lo tienes. He ido varias veces y siempre salgo sorprendido por la atención que te dan. Te aseguro que el trato es especial, sobre todo gracias a María, que siempre está con una sonrisa y hace que te sientas como en casa. Además, es un lugar muy querido por la gente del barrio; se nota que tienen sus clientes de siempre, y claro, eso habla muy bien del sitio.

La decoración también es un punto a favor, con una colección de cuadros de búcaros que, la verdad, le dan un toque bastante bonito y auténtico. Puede que hasta te sientas inspirado a pedir un par de platos mientras las miras. Cuentan con un ambiente muy acogedor, perfecto ya sea para una cenita tranquila o para un buen rato con amigos después del trabajo. Y si quieres saber algo más, la comida es de calidad. Por unos 20-30 euros por persona, te vas con el estómago lleno y la sonrisa en la cara.

Los platos son de lo más variados, aunque para mí, el salmorejo cordobés siempre es un must. Es cremoso y con un sabor que te recuerda a Andalucía en cada bocado. También tengo que decirte que la ensaladilla con bonito es otra de esas delicias que no puedes dejar pasar. Y no soy el único que lo dice; la peña habla maravillas del bacalao y de la presa ibérica. ¡Todo muy top!

En fin, si estás buscando un lugar donde la comida sea rica y de buena calidad, no dudes en pasarte por Sal y Tomate. Ofrecen una cocina de calidad, con opciones tanto de marisco como de carne, y un par de tapas que se te hace agua la boca solo de pensar en ellas. Perfecto para tapear o disfrutar de un menú completo. ¡Ya estás tardando en probarlo!

Qué distingue a Sal y Tomate de otros restaurantes en Sevilla

Y bueno, ¿qué te voy a contar del Bar Restaurante Sal y Tomate? Si estás buscando un sitio donde la relación calidad-precio sea, de verdad, adecuada, este es el lugar. Desde que llegas, te das cuenta de que el servicio es muy atento y correcto; no te hacen sentir como un cliente más, sino como parte de la familia. Eso se nota mucho cuando vas a comer, sobre todo si estás pensando en lo que te vas a llevar a la boca. Hablando de la comida, ¡las tapas y platos son una locura! Tienen una presentación muy cuidada, que es un gusto para la vista y para el paladar.

No puedo dejar de recomendar la ensaladilla de ventresca con esas dos mayonesas impresionantes. Es cierto que no son platos gigantes, pero están tan bien elaborados que te dejan con ganas de más. ¡Y no hablemos del ambiente! Es cálido y perfecto para cualquier tipo de encuentro, ya sea con amigos o una cena más íntima. Todo esto con un ambiente de cinco estrellas y un servicio que, sinceramente, te hace sentir muy a gusto.

Si te decides a probar algo diferente, ni se te ocurra perderte los arroces o el famoso secreto. De verdad, el lugar tiene esa mezcla de cocina creativa y un toque de cariño que lo hace destacar. Es como estar en casa, en esa casa donde todo lo que comes está hecho con buena vibra. Y aquí es donde se nota la diferencia: no solo comes bien, sino que vives una experiencia integral desde que pones un pie allí. La atención es realmente cálida y te hacen sentir especial, lo que, seamos honestos, se está perdiendo en muchos sitios hoy en día.

Entonces, ¿qué distingue a Sal y Tomate de otros restaurantes en Sevilla? Pues, sin duda, es la atención al cliente exquisita que ofrecen, junto con un menú lleno de opciones que combina lo tradicional con lo innovador. Este sitio se preocupa por cada detalle, desde la calidad de los ingredientes hasta la manera en que te hacen sentir cuando te sientas a la mesa. Así que, si no lo has hecho todavía, ¡no pierdas más tiempo y ve a descubrirlo!

Cuántas opciones de platos y bebidas tiene el menú de Sal y Tomate

Y ya que estamos hablando de Sal y Tomate, no puedo dejar de mencionar lo agradable que es el lugar. Tiene un ambiente muy bonito y tranquilo, perfecto para una buena comida o una tapa bien servida. El servicio es también un punto fuerte, con chicos como María, Ramón y Antonio que hacen que te sientas como en casa desde el momento en que entras. Además, me encanta que el trato sea tan profesional; parece que en este local, el ser camarero todavía es sinónimo de ser un auténtico crack de la atención al cliente. ¡Un 4 estrellas bien merecidas!

En cuanto a la comida, lo que hemos probado estaba muy bien, aunque las tapas, a veces, son un poco escasas en cantidad. Si decides ir, espera pagar entre 10 y 20€ por persona. Las tapas tienen esa creatividad que siempre sorprende: originales y con productos nacionales que saben a gloria. Y si eres fan de la ensaladilla como yo, no te la puedes perder; es, sin duda, la mejor que encontrarás en Sevilla. Pero ojo, que si vas en coche, aparcar puede ser un reto, así que ten en cuenta las opciones de aparcamiento gratuito en la calle, ¡es un detalle a considerar!

La verdad es que también he ido a desayunar y es una maravilla. Tienen una variedad de opciones bastante buena, ideal para tomar una buena tostada con jamón y salmorejo y acompañarla con un cafelito. El ambiente es limpio y acogedor, perfecto para empezar el día con buen pie. Aunque no he probado los platos más elaborados, la pinta que tienen es buenísima y seguro que no decepcionan. En ese sentido, creo que el menú de Sal y Tomate tiene suficiente variedad para que no te aburras, con tapas y platos que se adaptan a todos los gustos, aunque no tengo la cifra exacta de opciones. ¡Así que anímate y dale una oportunidad a este rincón sevillano!

Es un lugar recomendable para el desayuno

Y hablando de Bar Restaurante Sal y Tomate, tengo que decir que fue una de esas sorpresas que no te esperas. La atención de su personal es de 10, y el dueño está siempre dispuesto a atenderte con una sonrisa. Desde el momento en que llegas, parece que se aseguran de que no te falte de nada. Es un lugar donde realmente te hacen sentir bienvenido, y eso se nota. La comida... ¡vaya nivel! Yo probé la ensaladilla con ventresca de atún y fue un acierto total. Si a eso le sumas los huevos rotos con puntillitas al ajillo, ya tienes una experiencia gastronómica que otro sitio no te la va a ofrecer.

El ambiente también es genial, con una parte interna cómoda y mesas altas al aire libre. Perfecto para las noches de verano, ¿no? Una vez allí, haz caso a las recomendaciones del personal; de verdad que saben de lo que hablan. El solomillo y el revuelto dorado fueron dos de esos platos que no te puedes perder. Y para el toque dulce, ¡no olvides probar las torrijas! Sin duda, son las mejores de la ciudad, ¡te lo digo por experiencia!

Puedes cenar allí sin ningún problema por 20-30€ por persona, y te aseguro que cada céntimo vale la pena. La calidad de la comida y el servicio hacen que la experiencia sea realmente satisfactoria. Por eso, ya estoy planeando mi próxima visita.

Ahora, en cuanto a la pregunta de si es un lugar recomendable para el desayuno... Si bien se especializan en cenas, tiene opciones que pueden funcionar. Pero sinceramente, para ese primer café del día, quizás quieras buscar otro sitio. Aunque si decides quedarte, no está de más preguntar si tienen algo especial para esos momentos. ¡Te aseguro que no te arrepentirás de visitarlo, no importa la hora!

Qué tipo de ambiente se puede esperar en Sal y Tomate

Y ya te digo, Sal y Tomate es un sitio que se ha ganado mi corazón. Después de casi un año sin salir a comer por mis problemas de intolerancia a la fructosa, le hice caso a mi nutricionista María Fraile y decidí probar suerte aquí. Fue una experiencia de 10 desde el principio. La comida es excelente y, honestamente, el trato del personal, especialmente de Antonio y Miriam, fue fundamental. Se dieron un gran esfuerzo para adaptar los platos y quitar lo que no podía comer. ¡Menudo detallazo! El chef tiene que sentirse orgulloso de su equipo. Confianza 100%, sin duda repetiré.

La verdad es que, aunque algunos digan que los precios son un poco más altos que lo que se suele ver en Sevilla, lo compensan con productos de calidad y un servicio excepcional. Yo solo puedo hablar maravillas, la comida siempre deliciosa y la atención, impeccable. Recientemente, me pasé un sábado por allí y celebramos la vida con un café de verano que hizo Chabeli. ¡Impresionante! Si hay algo que valoro, es un buen café, y aquí lo saben hacer. Totalmente recomendable, y la presentación de los platos es un plus que no se puede pasar por alto.

Sin embargo, no todo es perfecto, y vi que algunos comentarios decían que el ambiente podría ser un poco agobiante en horas punta. Yo lo noté un par de veces, pero nada que no se pueda pasar a cambio de una buena comida. Pero dos cosas son claras: aquí la calidad de la comida y la atención son dignas de mención, y aunque haya alguna que otra falta de empatía en momentos de mucho trabajo, la mayoría de las veces el personal se esfuerza al máximo.

Entonces, ¿qué tipo de ambiente puedes esperar en Sal y Tomate? Pues verás, es un lugar donde puedes disfrutar de una buena comida en un ambiente acogedor y relajado, pero a veces puede haber un poco de jaleo por la cantidad de gente. Los chicos del equipo, mayormente atentos, crean una atmósfera amigable, perfecta para compartir buenos momentos con amigos o familia. ¡Definitivamente, un sitio donde vale la pena pasar un rato!

Cómo es el servicio en Bar Restaurante Sal y Tomate

Y si hablamos de la comida, ¡menuda delicia! El revuelto de bacalao dorado es una auténtica joya que tienes que probar. Una explosión de sabor en cada bocado que te hará querer repetir sin parar. Y no es solo que la comida esté rica, sino que la atención también juega un papel fundamental. Te lo dice alguien que ha probado de todo por aquí; si vas a Bar Restaurante Sal y Tomate, no puedes dejar de pedirlo. En serio, ¡es un must!

Sin embargo, no todo ha sido perfecto. Escuché de algunas experiencias menos afortunadas donde parece que el servicio no estuvo a la altura. Un comentario mencionaba un problema con el precio de la carta. Parece que se encontraron con un “fallo de imprenta” que hizo que acabaran pagando más de lo que esperaban. Eso es algo que definitivamente no debería ocurrir, ¿verdad? Al final, el buen trato y la calidad deberían ser lo que impera en cualquier sitio.

Pero, volviendo a lo bueno, hay quienes han salido encantados, como esa pareja que fue recomendada por un familiar y se sorprendió con lo que encontraron. Merendaron en la terraza techada y, según ellos, el ambiente era fresquito y agradable, ideal para disfrutar de una buena comida en Sevilla. Y, claro, no se olvidaron de mencionar a Chabeli, su camarera. Su atención y recomendaciones hicieron que la experiencia fuera de 10, ¡y eso siempre suma!

Así que, ¿cómo es el servicio en Bar Restaurante Sal y Tomate? En general, parece ser bastante bueno, sobre todo cuando te atiende alguien como Chabeli, que hace que te sientas como en casa. Aunque hay que tener cuidado con esos posibles errores en la cuenta que pueden dejar un sabor amargo. Entonces, si decides ir, ¡prepárate para disfrutar de la buena comida y el buen rollo que ofrecen, pero revisa tu cuenta con atención!

Fotografías Bar restaurante Sal y tomate