Restaurante Venta de Vargas

Restaurante Venta de Vargas

Si alguna vez te encuentras en San Fernando, no te puedes perder la Venta de Vargas, un restaurante con más de 100 años de historia, donde la tradición andaluza se vive a tope. Desde 1924 han estado deleitando a los comensales con sus deliciosas Tortillitas de Camarones y una variedad de pescado fresco que cambia a diario. Y si eres fan de los guisos, debes probar su famoso Rabo de Toro o la Berza Gitana. ¡Todo está pensado para que tu paladar pase un rato increíble!

Pero no solo de comida vive este lugar, también tendrás la oportunidad de disfrutar de un ambiente flamenco único. La Venta de Vargas rinde homenaje a grandes figuras como Camarón y suele ofrecer espectáculos flamencos mientras cenas. Y con un precio que ronda entre 30 y 40 euros por persona, es una experiencia completa que vale cada centavo. Así que guarda un hueco en tu agenda y reserva tu mesa, porque aquí la buena comida y la música se dan la mano.

Restaurante Venta de Vargas

Restaurante
4,3
2.523Reseñas
Fotos
Pl. de Juan Vargas, s/n, 11100 San Fernando, Cádiz
956 88 16 22

Horarios Restaurante Venta de Vargas

DíaHora
lunesCerrado
martes13:00–16:00
miércoles13:00–16:00
jueves13:00–16:00
viernes13:00–16:00, 21:00–23:30
sábado13:00–16:00, 21:00–23:30
domingo13:00–16:00

El horario podría cambiar.

Mapa Ubicación Restaurante Venta de Vargas

Dónde se encuentra la Venta de Vargas

¡Hola, fam! Hoy quiero hablarles de un lugar que no se pueden perder si están por San Fernando: la Venta de Vargas. Este restaurante es un auténtico tesoro lleno de historia y arte flamenco. Desde nuestra llegada, el ambiente te atrapa con su calidez y su decoración que recuerda a los grandes del flamenco. Y hablando de buen rollo, el personal es amable y profesional, ¡te hacen sentir como en casa!

La comida, ¡madre mía! Si te gustan los sabores del mar, tienes que probar los boquerones que están simplemente deliciosos. Y no olvides las tortillitas de camarones, son de esas cosas que vas a recordar mucho después de irte. Ahora, si eres de los que gusta de un buen vino, olvídate de pedir cerveza, porque aquí tienen unos finos de miso que son la bomba. Con una comida deliciosa, un precio que ronda entre 50 y 100 € por persona, depende de lo que pidas, y un servicio que te entiende con la mirada, seguro que te irás más que satisfecho.

Además, si decides visitar el museo de Camarón, que está justo al lado, sería el plan perfecto. Imagínate comer en un sitio donde se respira arte y pasión por el flamenco, ¡esto es un viaje a través de la cultura andaluza! Y créeme, el tocino de cielo con helado de vainilla y Pedro Ximénez es pura poesía en el plato.

Entonces, ¿dónde se encuentra la Venta de Vargas? Fácil, está en la Pl. de Juan Vargas, s/n, 11100 San Fernando, Cádiz. Así que ya saben, si están cerca, ¡no duden en acercarse y disfrutar de una experiencia maravillosa!

Cuántos años de historia tiene la Venta de Vargas

Y bueno, si estás pensando en un sitio que sea más que un simple restaurante, ¡la Venta de Vargas es el lugar! Este sitio es un auténtico templo del flamenco en San Fernando. Te va a encantar cómo está decorado, con un montón de recuerdos y fotos de Camarón de la Isla que realmente lo hacen especial. Es como si cada rincón te contara una historia y, la verdad, es que la experiencia completa es simplemente espectacular.

Y hablemos de la comida, que es tradicional y de buen sabor. Justo al lado del Museo de Camarón, es una parada obligatoria si estás explorando la bahía de Cádiz. Te recomiendo hacer una reserva porque se llena rápido. La última vez que fui, comí en las mesitas exteriores y pedí unos langostinos que estaban de muerte y unos boquerones rebozados que, te lo prometo, te van a quitar el sentido. Perfecto para disfrutar con una manzanilla bien fresquita. El ambiente es único, y el servicio, simplemente excepcional.

Claro, como en todos los sitios, hay quien puede encontrar que la comida no tiene ese "plus" que esperaban, pero, sinceramente, la fritura de pescado está muy bien hecha y nada aceitosa. Los bienmesabes son un must, pero las tortillitas de camarones y los huevos rotos pueden no ser la mejor elección. Si te dejas llevar por lo que mejor se sirve, seguro que no te arrepientes. Y no olvides dejar hueco para el arroz con leche, que aunque a algunos no les despega el sabor ideal, a otros les encanta.

Así que, entre la comida, la música en directo y el ambiente cuidado con pasión, es un viaje que hay que hacer si visitas Cádiz. La Venta de Vargas tiene una rica historia que se remonta a más de 60 años, convirtiéndose en parte esencial de la identidad de San Fernando. ¡Definitivamente, tendrás que volver!

Qué tipo de comida se ofrece en la Venta de Vargas

Y hablando de la Venta de Vargas, ¡vaya joya que encontramos en San Fernando! Os cuento que nos pegamos un festín que no olvidaré en mucho tiempo. Las papas aliñás que sirven allí son, sin duda, las mejores de la zona; crujientes, bien condimentadas, ¡un auténtico manjar! Y ni hablemos del cazón en adobo, suave y con un sabor impresionante. La relación calidad-precio es simplemente inmejorable, ¡comer allí es una ganga! Además, si buscáis un plan más divertido, tenéis espectáculos en directo de flamenco todas las semanas. Un planazo perfecto para disfrutar con amigos, ¿no creéis?

La atmósfera del lugar es realmente encantadora, con esos salones decorados a lo tradicional andaluz y con mucha historia. Es como comer en un homenaje a la cultura flamenca y al gran Camarón. Si lo que buscáis es una experiencia auténtica de Andalucía, este es sin duda el sitio. Desde que rompimos el hielo con unas almejas a la marinera hasta un bienmesabe que te deja sin palabras, la comida fue top en cada plato. Ah, y no os olvidéis del tocino de cielo con helado para rematar la velada; ¡todo espectacular!

Aunque debo admitir que no todo ha sido perfecto. En una de nuestras visitas, pedimos carne y pescado, y no estaban tan allá. La comida era un poco normalita, en mi opinión. Lo que se salva son las tortillitas de camarones, que son un clásico que no fallan. Pero en general, la falta de consistencia en la calidad es algo a tener en cuenta si tenéis expectativas altas.

En cuanto a la pregunta que todos nos hacemos: ¿Qué tipo de comida se ofrece en la Venta de Vargas? Bien, la oferta va desde maravillosas tortillitas de camarones y lenguado a la plancha, hasta esos platos sencillos que se reinventan con un toque especial. Claro que también está el bienmesabe, que es un must si queréis llevaros un trocito de Andalucía en el corazón. Así que ya sabéis, ¡preparad el estómago y no olvidéis reservar!

Cuáles son algunos de los platos más populares del restaurante

Y bueno, si hablas del Restaurante Venta de Vargas, sabes que es un sitio con mucha historia del flamenco. Este lugar no es solo un restaurante, es un pedacito de la cultura andaluza. Desde que entras, te invade la historia; tienes fotos de cantaores legendarios como Camarón de la Isla adornando las paredes. Si eres fan del flamenco, este lugar te dejará sin palabras. Es como un viaje al pasado mientras disfrutas de buena comida.

Aunque tengo que ser sincero, la experiencia culinaria puede ser un poco variable. La comida, aunque buena, a veces no es nada del otro mundo. Hay días en que puede que te sorprenda, pero otras veces puede que te decepcione un poco. La calidad está ahí, pero, como me contó un amigo, puede dejar “bastante que desear” a veces. Por eso, tal vez lo mejor es no esperar una experiencia gastronómica espectacular cada vez que vayas, sino disfrutar del ambiente.

Lo que sí puedes contar como un must son las tortitas de camarón. Son, para muchos, las mejores de toda la provincia de Cádiz. Además, los boquerones, las papas aliñás y la famosa tabla de ibéricos son otras delicias que no te puedes perder. Aunque el servicio puede tener sus altibajos, el ambiente siempre es un diez. Es ideal para relajarte, escuchar algo de flamenco y disfrutar de una buena cena con amigos o en pareja.

Así que ya lo sabes, si estás buscando un lugar que combine la música en vivo con una experiencia culinaria decente, Venta de Vargas es una excelente opción. No te olvides de probar esos platos que te mencioné, y aunque el servicio puede fallar a veces, volverás por el encanto del lugar. ¡Y no dudes en pedirme más recomendaciones cuando vayas!

Qué son las Tortillitas de Camarones

Y ya que hablamos de la Venta de Vargas, no puedo dejar de recordar aquella noche espectacular que pasamos allí. Sabíamos que mis amigos, que vienen todos los veranos, estaban deseando ver un buen espectáculo flamenco y este lugar es casi un templo del arte. Así que hicimos la reserva de cena y actuación, y vaya que fue una elección acertada. La atmósfera era única, y aquel local, que tiene tanta historia, nos hizo sentir como si estuviéramos reviviendo un pedacito de la cultura flamenca en San Fernando. Además, como dijo el encargado, aquí no hay guiris, ¡porque si no sería una función distinta para ellos! Eso me hizo reír. Sin duda, tiene mucho arte, y es un sitio que nunca decepciona.

Para la cena, elegimos un menú, pero he de ser sincero y decir que en esta ocasión quedó un poco corto. Parece que el bullicio de agosto influye un poco en la cantidad de comida. Por ejemplo, nos dimos cuenta de que faltaron algunas delicias, como las coquinas que tanto nos gustan. Espero que solo haya sido una excepción, porque el espectáculo fue genial, ¡anima a cualquiera! Y no sé si mencionarlo, pero con un ambiente tan acogedor y un servicio amable, la experiencia se eleva a otro nivel.

Hablando de comida, no puedo dejar de pensar en las tortillitas de camarones. Si no las has probado, te cuento que son como pequeñas delicias crujientes hechas de una mezcla de harina, agua, y por supuesto, camarones. Es un clásico que no puede faltar en ningún viaje por aquí; al darles un bocado, casi siempre te transportan al corazón de Andalucía. Son ligeras, sabrosas y, sinceramente, ¡fundamentales en cualquier visita! Así que, si decides ir, no olvides incluirlas en tu pedido. Te aseguro que no hay forma de arrepentirse de saborear estas joyas junto a la tarta de queso o las papas aliñas, ¡todo un festival para el paladar!

El menú de la Venta de Vargas cambia con frecuencia

Y ya que estamos hablando de la Venta de Vargas, la verdad es que es un auténtico templo para los amantes de la historia del flamenco y de Camarón. Si tienes un ratito, deberías darte una vuelta por el local. Aparte de disfrutar de una comida impresionante, te vas a topas con un montón de fotos y recuerdos que te transportan a otra época. Si te sientas a comer aquí, asegúrate de probar el ibérico de bellota, parece que es la joya de la corona. Y debes tener en cuenta que, aunque la tortillitas de camarones a veces pueden salir un poco espesas y grasientas, ¡es parte del encanto!

El servicio, en general, es excelente; ya sabes, hay que saber pedir las cosas. Los camareros son super amables y siempre están dispuestos a ayudarte, así que no dudes en preguntarles qué es lo más diferente que tienen para ofrecer en el menú. Y si hay algo que realmente tienes que probar, son las papas aliñas y, por supuesto, la dorada de estero a la roteña. La preparan de una forma que no querrás perderte—buenísima, de verdad. Pero ya te digo, la amabilidad del personal le suma un plus a la experiencia, ¡te hacen sentir como en casa!

A pesar de que la carta no es inmensa, cada plato está elaborado con ingredientes de primera calidad, lo que le da un sabor especial a todo. Es el tipo de comida familiar que da gusto comer, como esas típicas recetas que siempre te recuerdan a la cocina de la abuela. De hecho, mientras disfrutamos de nuestras delicias, tuvimos la suerte de escuchar flamenco en vivo. ¿Qué mejor manera de disfrutar una cena?

Y para responder a tu pregunta sobre si el menú de Venta de Vargas cambia con frecuencia, bueno, generalmente mantienen esos platos clásicos que tanto gustan, pero también dan espacio a algunas novedades de vez en cuando. Así que, aunque siempre encontrarás las tortitas de camarones y el huevo roto, es posible que te sorprendan con alguna opción nueva en tu próxima visita. Sin duda, es un lugar que te hace querer volver una y otra vez.

Qué es el Rabo de Toro y por qué es famoso en este restaurante

Y ya que estamos hablando de la Venta de Vargas, lo primero que tienes que saber es que este lugar tiene dos estrellas y, aunque vive de los esplendores del pasado, no todo es lo que parece. Te recomiendo que te pases un día si quieres probar un menú del día por 26€. No es la cosa más espectacular del mundo, pero está sencillo y bien cocinado, lo cual siempre se agradece. Sin embargo, no esperes un trato espectacular; aquí el servicio es más bien ramplón y desabrido. La verdad es que el postre es industrial, así que mejor pregúntale al camarero si hay alguna opción casera.

Pero, si tienes tiempo, no te lo pierdas. La historia de este bar es impresionante. Tiene un ambiente que te transporta a otra época, y no es para menos, ¡aquí es donde Camarón y otros artistas legendarios solían cantar! Al final del día, es un bar típico andaluz, por lo que tienes que ponerte en modo 'fino y tapas'. Yo me pedí un fino y una ración de coquinas y el vino estaba de muerte, aunque las coquinas podrías encontrarlas un poco mejorables. Eso sí, ten en cuenta que el precio es un pelín más caro, pero creo que la experiencia vale la pena.

Hablando de recomendaciones, si decides ir, no puedes perderte el lenguado a la plancha, las tortillitas de camarones, las almejas al Tío Pepe, y claro, el pescaito frito. Todo ello me hizo sentir que estaba comiendo en casa de la abuela, pero con un toque de historia mezclada.

Y ya que mencionamos lo famoso, el Rabo de Toro es uno de esos platos que todo el mundo habla en la Venta de Vargas. Es un guiso típico que se hace con la cola del toro, y aquí lo preparan con cariño, lo que le da un sabor profundo y único. Muchos dicen que es el alma de la comida andaluza, y si visitas el restaurante, no puedes irte sin probarlo. La fama de este plato, junto con su historia, seguramente te dejará con ganas de volver por más. ¿Te animas?

Fotografías Restaurante Venta de Vargas

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